La vida es de color naranja

Reflexiones a la luz del monitor

miércoles, julio 21, 2004

Todavía me estoy riendo

No se como confiaban en convencernos para que hiciéramos la mudanza. Incluso me pidieron que pusiera el coche! Vaya cara más dura!. Pero el juego de la presión lo ganamos nosotros.

Lo siento por la gente de administración, pero los que pringan es por que quieren. Nadie les obliga a ello, lo hacen por voluntad propia, o por falta de personalidad quizás. Lo mejor de todo es cuando ves a la de recursos humanos cargando un monitor, con cara de perro rabioso. Luego se te acercan con cara de pena y te dicen “¿No nos vais a echar una mano?”.

He sido borde, por primera vez en mucho tiempo he sido un borde con la gente de la empresa, pero es que se lo merecían. Se ha acabado eso de abusar de tu confianza, del discurso de que somos una familia, si el compañerismo, si yo te ayudo a ti y tu a mi, etc.

Ya he dejado de ser un tonto, yo me dedico a lo mío. La empresa me putea todo lo que puede y más, ¿Encima he de ir y ayudarles por su falta de previsión?, ¿He de permitir que se ahorren dinero a mi costa?. Lo dicho, se acabó.