La vida es de color naranja

Reflexiones a la luz del monitor

miércoles, abril 21, 2004

Una de gafas...

Creo que la gente debería tener más cuidado con lo que dice. Pensarlo dos veces antes de acabar metiendo la pata. Y es que hay situaciones en las que nos vemos envueltos y en las que pensamos aquello de “tierra trágame”.

Normalmente cuando me pasa, me doy cuenta enseguida. La cara de las personas o persona con la que estoy cambia radicalmente. No es que me pase muy a menudo, pero cada cierto tiempo es norma “cagarla”.

Lo que es más extraño es que no me de cuenta de que estoy metiendo la pata hasta tiempo después. Y es que me ha venido a la mente una situación de hace tiempo, podríamos decir años. Raramente no he sido consciente de la barbaridad hasta ahora, todo ocurrió un verano, en una muy conocida discoteca de Barcelona.

Por aquel entonces, no se si todavía, trabajaba allí una persona encargada de controlar la gente que entraba en el lavabo. Ingrato trabajo el suyo, básicamente consistía en no dejar pasar más de cuatro o cinco personas al recinto acondicionado para evacuar. El motivo no era otro que evitar que la gente se drogara en grupo en un lavabo.

Bien, pues esta persona siempre llevaba gafas de sol. Raro para la noche, el motivo no era otro que ocultar su supuesto, tampoco lo llegue a comprobar, ojo de cristal. Aunque esto último no fuera cierto, esta persona era consciente de que ese rumor corría por los círculos más asiduos al local.

La situación fue la siguiente, esperando entrar a mear, llevaba mis queridísimas gafas Okley naranjas conmigo (Esto se llevaba y se lleva todavía). Estas gafas totalmente naranjas no tienen cristales si no un tipo de plástico casi irrompible, Debido a que se utilizan para hacer deporte. De esta forma se intenta evitar que se dañe el ojo en caso de accidente.

Pues bien, cara a cara , gafas naranjas contra gafas de sol, el tío va y me dice en coña “vaya mierda de gafas, son de plástico”. Y yo ni corto ni perezoso le contesto “ de mierda nada, son Okley, quieres que me ponga unas con cristales para que me las partan y me saquen un ojo?”.

Hasta hoy no me he dado cuenta de mi “cagada”, pero pensándolo bien, se lo merecía!!!!